Hoy toca hablar de Hanoi. No he actualizado antes, porque hemos estado de aquí para allá, con buses, excursiones, visitas, etc. y no ha habido tiempo para esto. Cuando llegamos a
Hanoi, la verdad es que no sé como describirlo, pues tras varios meses viviendo en
China, creía que ya iba a estar más o menos hecho a situaciones complicadas, con cosas extrañas, pero la verdad es que no. En cuanto entras en
Vientam, al pasar la frontera con China, el número de motos incrementa exponencialmente hasta que llegas a la capital, en la cual todo es una locura.